Desde hace bastantes años tengo
colgado en mi biblioteca este cartel de la feria del libro. Siempre me ha hecho
reflexionar. Hace tiempo que vengo pensando que nos rodea la falta de belleza, de ideas, de
pensamiento, de espíritu crítico y de conocimiento. Ante tanto
catastrofismo y miedo, hábilmente manipulado por los medios de comunicación con
las noticias constantes sobre la crisis, muchos no saben qué pasa, por qué pasa
y temen por su futuro. Los que todavía tienen la suerte de no estar sufriendo un
duro presente, también tienen miedo, pero no parecen hacer nada por dar sentido a
su actividad y su quehacer diario.
Por eso, porque creo que hay unas
cuantas cosas que podemos hacer para empezar a cuidar la cabeza voy a utilizar
el símbolo del sombrero. Es un sombrero muy especial, el de la conciencia y la
cultura. Sirve para que la gente se proteja de todas las cosas que caen sobre sus
cabezas, sirve para invitar a la gente a utilizar la mente, cogiendo un libro y
leyendo, disfrutando de la belleza y del arte, tomando conciencia ciudadana de
que sólo a través de la cultura y de la educación, del conocimiento y del
pensamiento podemos salir mejor parados de lo que nos acontezca.
Es curioso que hace ya un par de
décadas se empezaba a hablar de la emergente sociedad del conocimiento, en la
que iba a ser fácil compartir y acceder a la información gracias a la
revolución de Internet y de las comunicaciones. Veinte años después el
resultado no es tan satisfactorio como auguraban. A pesar de los infinitos recursos
de información a los que hoy podemos acceder, parece que cada vez estamos más
invadidos por la ignorancia, la manipulación y el miedo, y que los millones de tuits
que viajan por la red sólo son noticias manipuladas y sucedáneos hechos de citas e ideas del pasado resumidas
y falseadas.
Desde aquí, pondremos en marcha la
estrategia del sombrero, que consistirá en proteger nuestra cabeza con las
lecturas, exposiciones, actuaciones, reflexiones y viajes de este antipático
iluso, que todavía piensa que hay algo que podemos hacer, que es lo siguiente: utilizar
la razón y no dejarnos aborregar ni llevar por falsas polémicas; ser un poquito
más libres; actuar, no quedarnos quietos y hacerlo más en comunidad; leer,
estudiar, cultivar el espíritu; decrecer, no despilfarrar.
Qué maravilloso regalo de Navidad¡
ResponderEliminargracias
¡Intentaré calzarme este sombrero antes de que me estalle la cabeza! Espero que su beneficioso efecto cicatrice las heridas que he ido acumulando...
ResponderEliminarUn gusto reencontrarte, ¡gracias por volver!